Manuel Antonio Sanclemente
Manuel Antonio Sanclemente.
Sanclemente (Buga, Provincias Unidas de la Nueva Granada,
19 de septiembre de 1813 - Villeta, Cundinamarca, Colombia,
19 de marzo de 1902) fue un estadista, educador, jurista y político colombiano
que ocupó la Presidencia de la República entre
1898 y 1900. Durante su gobierno estalló la Guerra de los Mil Días. Adicionalmente es
recordado por ser el presidente posesionado a mayor edad en la historia, tenía
85 años.
Cursó sus estudios superiores en la Universidad del Cauca en Popayán,
obteniendo el título de Doctor en Jurisprudencia (abogado) en el año de 1837.
Entonces desempeñó varios cargos judiciales, y fue electo en la Corte Suprema
de Justicia en 1854. Igualmente se dedicó al derecho y al magisterio, al ser
rector del Colegio de Buga.
El doctor Sanclemente fue electo en
innumerables ocasiones como representante a la Cámara y senador por el Cauca a
nombre del Partido Conservador. Su
carrera daría un giro hacia la rama ejecutiva al ser tenido en cuenta como
Secretario de Gobierno y de Guerra en el mandato de Mariano Ospina Rodríguez en 1857. Le
correspondió afrontar la guerra civil de el año 1860, que se inició en los
estados del Cauca, Santander y Bolívar y se extendió por todo el país,
destacando las acciones del Oratorio, Manizales, Segovia, La Barrigona,
Subachoque, El Rosal, Usaquén y Bogotá.
Sanclemente participó directamente en
la campaña de Santander con el presidente Ospina Rodríguez, y asistió a la
batalla del Oratorio. El 18 de julio de 1861 los revolucionarios se tomaron
Bogotá, la capital de la Confederación Granadina; allí tomaron prisioneros al
presidente Mariano Ospina Rodríguez y en la misma forma se desintegró el
gabinete presidencial, del cual hacía parte Sanclemente.
Tras estas tribulaciones se exilió en Panamá,
pero años después regresa a su tierra natal donde tiene una gran acogida y
regresa al Congreso.
En 1898 es apoyado por el presidente Miguel Antonio Caro, a quien había servido muy
brevemente como ministro de Gobierno. Impulsado por Caro con la intención de
seguir ejerciendo el control del gobierno a través de un presidente octogenario
(su avanzada edad fue muy criticada durante la campaña), derrotó
abrumadoramente al candidato liberal Miguel Samper,
pero no pudo trasladarse de Buga a Bogotá a tomar posesión el 7 de agosto,
debido a los fuertes quebrantos de salud que padecía. En su reemplazo se
posesionó el vicepresidente José Manuel Marroquín; el 3 de noviembre
logra llegar a Bogotá y toma posesión, pero de inmediato traslada el gobierno a
la población de Villeta,con la que encontraba más cómoda para sus condiciones
de salud debido a su baja altura sobre el nivel del mar.
Desde el principio de su mandato
Sanclemente debe afrontar la férrea oposición liberal y del llamado sector
histórico del Partido Conservador, el era parte del Partido Nacional y que era encabezado
por el propio vicepresidente Marroquín. En 1899 estalló la Guerra de los Mil Días en la que el
Partido Liberal se enfrentó al gobierno, y ante la inestabilidad incontrolada
el vicepresidente Marroquín fue animado por el partido conservador a derrocar
al presidente Sanclemente, lo cual se concretó en el golpe de Estado del 31 de
julio de 1900.
La dignidad de la patria no puede
olvidar la traición del Vicepresidente Marroquín, a través de Manuel
Casabianca, contra el presidente Constitucional Sanclemente, a quien el traidor
mandó a una prisión en donde torturó física y sicológicamente al anciano
Presidente buscando que éste firmara su dimisión. Sanclemente varias veces
abofeteado, privado de alimentos e incluso del derecho a dormir, pues se le
despertaba constantemente, mantuvo firme su decisión de no firmar su dimisión.
Fueron tan crueles los tratos recibidos por el Presidente titular, que un
General enviado por Marroquín a exigirle la renuncia lo arrastró del cabello
hasta arrancarle un puñado de ellos, "decid a vuestro amo que habéis
querido matarme, pero no habéis podido amedrentarme" fue la única
respuesta que, con débil voz, envió el doctor Sanclemente al usurpador
Marroquín.
Sanclemente fue sepultado en la
iglesia parroquial de Villeta, Cundinamarca, población en la que murió el 19 de
marzo de 1902.
Rafael Reyes Prieto
(Santa Rosa de Viterbo, 1850 -
Santafé de Bogotá, 1921) Militar y político colombiano, presidente de la
República entre 1904 y 1909. Comerciante, viajero y explorador, durante su
juventud se dedicó a la explotación de quina. Descubrió nuevas rutas de comunicación
en la Amazonia, la Orinoquia y el Magdalena y, para esa época, contrajo
matrimonio con Sofía Angulo Lemus.
Cuando quebró su empresa comercial,
en 1885, se hizo militar y participó del intento de reconquista de Panamá; poco
después comenzó su vida pública como senador; el presidente Núñez lo hizo
miembro del Consejo Nacional de Delegatarios, representante del gobierno en
Londres y ministro de Fomento. En 1888 regresó a la actividad privada y se
vinculó a la naciente industria bananera.
En la guerra civil de 1895 obtuvo una
clara victoria al frente de las tropas gobiernistas en la batalla de Enciso,
por lo que se le brindó un apoteósico recibimiento en Bogotá. Cuando se desató
la guerra de los Mil Días Reyes se desempeñaba como embajador en París y fijó
luego su residencia en México; en tierras aztecas dio a conocer su opinión:
convenía primar los asuntos económicos sobre los políticos.
Elegido presidente en 1904, con el
apoyo de un sector de los conservadores, se dedicó a gobernar en un régimen
dictatorial conocido como el "Quinquenio de Reyes". Impuso una
política proteccionista y medidas económicas tendientes a recomponer la
desastrosa situación económico-financiera del país tras la guerra de los Mil Días.
Pero el abuso de sus facultades presidenciales, la clausura del Congreso y su
reemplazo por una Asamblea adicta terminaron por fortalecer a la oposición:
Reyes tuvo que enfrentar dos conspiraciones en su contra.
En 1909 se registraron en Bogotá
grandes protestas contra los tratados con Estados Unidos y Panamá, y el
gobierno debió retirarlos. Tras el triunfo en las elecciones legislativas de la
opositora Unión Republicana, el 4 de junio de ese año el presidente presentó su
renuncia, encargando el poder a Jorge Holguín. Nunca regresó a la capital: a
bordo de un buque de la United Fruit comenzó un exilio voluntario que duró diez
años. Reyes volvió a Colombia en 1920 y falleció en Bogotá, víctima de una
pulmonía, el 18 de febrero de 1921.
Carlos Eugenio Restrepo
Restrepo
Nace el 12 de septiembre de 1867 en Medellín, Colombia. Hijo
de Pedro Antonio Restrepo y de Cruzana Restrepo, estudió durante su niñez en
Itagüí y Medellín. Luego Estudio humanidades en el Seminario Conciliar y
derecho en la Universidad de Antioquia, sin llegar a terminar la carrera debido
a la guerra civil de 1885, donde luchó bajo el mando del general Marceliano
Vélez en las filas conservadoras de Antioquia. Después de la guerra trabajó en
una firma de abogados propiedad de su padre como asistente. En abril 1890 se
casó con Isabel Gaviria, con quien tuvo 4 hijos y 5 hijas. Entre 1888 y 1898
trabajó como inspector de instrucción pública, secretario de juzgado y juez
superior de Antioquia. Allí mismo fue nombrado secretario de gobierno de ese
estado en 1898 y al año siguiente seria director del periódico El Correo. Al
iniciar la guerra de los mil días, sirvió como jefe del estado mayor de Pedro Nel
Ospina y entre 1901 y 1902 fundó la Sociedad de Mejoras
Publicas, además de ser rector de la universidad de Medellín. Con motivo de la
separación de Panamá el 3 de noviembre de 1903, Restrepo formó las Juntas
Patrióticas para unir a liberales y conservadores, acto que sería precursor de
la Unión Republicana de 1909. El periódico La República fue fundado por
Restrepo con el propósito de difundir las ideas de este partido, dejando de
lado el partidismo siempre imperante en la nación y que sería muy crítico al
gobierno de Rafael Reyes.
Ese mismo año asistió a la cámara de representantes y en 1910, durante el
gobierno de Ramón
González Valencia se convocó una asamblea para reformar la
constitución de 1886, de la que Restrepo hizo parte junto al general Pedro Nel
Ospina y los liberales Rafael Uribe Uribe y Enrique Olaya
Herrera, entre otros. Esta reforma daba al nuevo presidente la
opción de ser elegido por voto directo del pueblo y reducía su periodo a 4
años. Además se abolía la pena de muerte y se dejó de emitir papel moneda.
Carlos E. Restrepo fue elegido para el periodo de 1910 a 1914, sucediendo a
González Valencia. Su gobierno se caracterizó por la restauración de la
economía. Al comenzar su periodo el país tenía un déficit de más de 4 millones
de pesos y al finalizar el año ya había superávit, esto gracias a la reducción
sustancial de gastos y al aumento de los impuestos. Empezó a circular
nuevamente el oro y la plata, y la economía en general mejoró
considerablemente. Se crearon en este periodo las comisarías de Arauca,
Caquetá, Guajira, Putumayo, San Andrés y Providencia, Vaupés, Vichada y Urabá.
Empezaron las obras del palacio de Justicia y se construyó el edificio de la
imprenta nacional en Bogotá. Como gran hombre de negocios, procuró sancionar
leyes para proteger a las industrias. Volvió obligatorio el servicio militar,
reconstruyó los ferrocarriles de Girardot y del pacifico y empezó la
construcción del ferrocarril que conectaría a Pasto con Medellín. En 1911 debió
enviar hombres a la frontera con Perú debido a la invasión de estos a
territorios colombianos, donde si bien se dieron enfrentamientos, la definición
de los limites se concretaría solo después de otra guerra, en 1932. Pocos meses
antes de finalizar su gobierno, el día 6 de abril de 1914, se firmó el tratado
Urrutia-Thompson, donde Estados Unidos reconocía ante Colombia su intervención
en Panamá al momento de su separación de Colombia, con una indemnización de 25
millones de dólares y el libre tránsito por el canal de buques de guerra mas no
de buques comerciales, los cuales estaban sujetos a pago de aranceles como
todos los demás países. Sin embargo la ratificación del tratado tardó hasta
finales de 1921 y fue motivo de críticas contra el gobierno del entonces
presidenteMarco Fidel
Suarez, quien habría de renunciar a causa de esto y de la crisis ese
mismo año. Para suceder en la presidencia a Restrepo se eligió a José Vicente
Concha para el periodo 1914 - 1918. Como ex presidente,
Restrepo se retiró de la vida política para dedicarse a la industria y el
periodismo. Fundó la revista Colombia en 1916 y tuvo diferentes cargos
administrativos en empresas del país: fue parte de la junta administrativa de
Bancoquia (Banco Comercial Antioqueño, ahora Banco Santander), director de la
Empresa de Energía, director de la Compañía Colombiana de Tabaco y socio
mayoritario de su propia compañía, llamada C. E. Restrepo & Cía. En 1930
vuelve a la política como ministro de Gobierno para el presidente Enrique Olaya
Herrera y luego viajaría al Vaticano como embajador. Carlos Eugenio Restrepo
muere el 6 de julio de 1937 en Medellín.
Marco Fidel Suárez
(Bello, 1856 - Bogotá, 1927) Escritor y político colombiano,
presidente de Colombia entre 1918 y 1921. De origen muy humilde, quiso ser
sacerdote, pero su condición de hijo natural se lo impidió. Desempeñó en su
mocedad diversos cargos subalternos: portero de la Biblioteca Nacional,
empleado del Banco de Colombia, de un colegio, etc.; pero jamás abandonó el
estudio y pudo así ir adquiriendo una sólida preparación, especialmente en lo
que se refiere a los problemas del lenguaje y del derecho internacional.
Cuando en 1881, con motivo del centenario del nacimiento de Andrés Bello,
fue convocado un certamen conmemorativo, Marco Fidel Suárez obtuvo la medalla
de oro con su Ensayo sobre la Gramática de don Andrés Bello, que publicó
la Academia Colombiana en 1884 y se editó al año siguiente en Madrid. Suárez
adquirió así relieve en el mundo de las letras y no tardó en adquirirlo en el
campo de la política, en el que su posición conservadora de hombre de derecho
lo fue llevando a los puestos de diputado, senador, ministro de Instrucción
Pública y de Relaciones Exteriores y, finalmente, a presidente de la República
(1918-1921), cargo que abandonó antes de que expirara su mandato, ante el feroz
ataque de que era objeto en el Congreso.
El gobierno de Marco Fidel Suárez resultó contradictorio
desde sus inicios, pues a la vez que promulgaba la caridad cristiana y la
benevolencia y ayuda de los ricos a los pobres como la mejor solución a los
nacientes problemas sociales, su acción fue abiertamente hostil a las
reivindicaciones obreras. Sin embargo, se efectuaron importantes reformas en
materia de ordenamiento: el 27 de noviembre de 1918 se creó el impuesto sobre
la renta; el 5 de diciembre de 1919 se fundó en Barranquilla la empresa de
aviación Sociedad Colombo Alemana de Transporte Aéreo (SCADTA), antecesora de
la actual Avianca, que se inauguró en julio de 1920 y que fue pionera en el
transporte aéreo en América Latina.
Su gobierno definió una política exterior abiertamente
pronorteamericana (su lema: respice polum, mirar al norte), lo que
correspondió en parte a la nueva situación creada por la posguerra, cuando se
acentuó la hegemonía económica de los Estados Unidos, y en parte a situaciones
locales mediadas por la firma del tratado Urrutia-Thomson y la determinación de
la política petrolera en lo referente a las concesiones. Durante el mandato de
Suárez se conmemoró el centenario de la batalla de Boyacá y se creó la Cruz de
Boyacá, condecoración para oficiales del ejército que después se hizo extensiva
a los civiles.
En el terreno económico, en octubre de 1920 se inició una
agónica crisis económica: el café se cotizó entre 10 y 11 centavos la libra, y
el dólar se pagó al 130 por ciento. La crisis se acentuó ante la proximidad de
las elecciones presidenciales y la división del partido de gobierno, lo que
tuvo como consecuencias un incontenible descontento y desórdenes sociales,
debidos también a la intención de facilitar la aprobación del tratado con los
Estados Unidos, que el Senado comenzó a discutir el 22 de agosto de 1921. La
difícil situación económica, unida a algún negocio personal muy criticado y a
la permanente presión de la Cámara de Representantes, especialmente de Laureano
Gómez, provocaron la renuncia de Suárez el 11 de noviembre de 1921.
Sus últimos años fueron los más fecundos de su vida
literaria, pues los dedicó esencialmente a la redacción de los Sueños de
Luciano Pulgar. El propósito principal de esta obra fue defenderse de algunos
cargos personales y de ciertas acusaciones que la prensa y el Parlamento habían
hecho contra su gobierno. Como estos escritos, por su carácter polémico y por
sus alusiones personales, despertaron vivo interés en el público, Marco Fidel
Suárez resolvió continuarlos en serie casi indefinida: su totalidad ocupa cerca
de doce volúmenes.
Desde el punto de vista literario, los Sueños de Luciano
Pulgar, redactados en forma dialogada, ponen de relieve todas las virtudes
estilísticas que hicieron de Suárez un escritor verdaderamente clásico. Desde
su juventud había cultivado los estudios gramaticales, y al lado de Cuervo,
monseñor Carrasquilla, Caro y Gómez Restrepo, había destacado como uno de los
principales maestros de la filología castellana. En cuanto a la materia
tratada, hay en los Sueños de todo: historia política del país,
asuntos gramaticales, cuestiones de orden jurídico e internacional, temas
religiosos, semblanzas y retratos literarios y recuerdos personales. Son una
verdadera enciclopedia de la vida colombiana en sus múltiples aspectos. El
recuerdo de Quevedo asoma frecuentemente, pues la punzante ironía fue una de
las armas de que se valió Suárez para abatir a sus enemigos.
Pese al gran interés de los Sueños, no desmerecen junto
a ellos las series de Escritos, la primera de ellas aparecida en 1914, y
la otra, después de su muerte (1935); dos selecciones de Escritos se
publicaron en 1942 y 1954. Otras obras suyas son Estudios gramaticales y El
castellano de mi tierra. Entre sus muchos discursos sobresale la Oración a
Jesucristo, obra magna de la oratoria sagrada, pronunciado durante el Congreso
Eucarístico Colombiano de 1913. En su libro Semblanzas presentó a
varios colombianos notables y algunos ensayos lingüísticos e históricos.
Pedro Nel Ospina
(Bogotá, 1858 - Medellín, 1927) Militar y político colombiano
que fue presidente de Colombia (1922-1926). Ingeniero de minas, industrial,
docente, periodista, escritor, militar y comerciante, hijo del ex presidente Mariano
Ospina Rodríguez, fue un gran promotor del cultivo del café en
Colombia.
Inició su vida pública en 1890, cuando asistió por primera
vez a la Asamblea de Antioquia; luego fue elegido representante por ese
departamento y posteriormente senador. Participó en la guerra de los Mil Días y
fue ministro de Guerra durante el mandato de Marroquín. Intervino en las
negociaciones con EE UU a raíz del conflicto del istmo de Panamá (1903).
Durante el gobierno de Rafael Reyes tuvo que radicarse en el exterior. En 1910
fue nombrado embajador en los Estados Unidos y pasó después a las embajadas de
Bélgica y Holanda.
Fue elegido presidente para el cuatrienio 1922-1926. Su
principal preocupación fue modernizar e industrializar el país, para lo cual
contó con el pago de la indemnización de Panamá. Se impulsaron los
ferrocarriles, se incrementaron los cultivos de café y el transporte aéreo, se
dio inicio a la explotación petrolera. Las fuerzas militares y la instrucción
pública recibieron considerables recursos y se creó el Banco de la República.
Miguel Abadia Mendez
Miguel Abadía Méndez nace el 5 de junio de 1867 en la Vega de
los Padres (actual Coello), Tolima, Colombia. Se educó en Bogotá, primero en el
colegio del espíritu santo, posteriormente en la universidad católica y luego
graduándose como abogado del Colegio Mayor del Rosario en 1888. Al poco tiempo
se casaría con Elisa Santamaría, al tiempo que participó como redactor del
periódico el Colombiano, apoyando al candidato presidencial Miguel
Antonio Caro en 1891. Ocupó varios ministerios, en algunas
ocasiones como titular y otras como encargado durante la administración de José Manuel
Marroquín en 1900, siendo estos el ministerio de relaciones
exteriores, el ministerio de hacienda y el ministerio de instrucción pública.
Poco antes, Abadía había sido junto con José Vicente
Concha, parte de la conspiración para derrocar a Manuel
Antonio Sanclemente, ayudando a Marroquín a tomar el poder. Después
del quinquenio de Rafael Reyes,
en 1909 Abadía fue ministro de gobierno para el presidente Ramón
Gonzales Valencia. Fue nuevamente ministro de Gobierno en 1915 para
el presidente José Vicente Concha y ministro de instrucción pública en 1919
durante el gobierno de Marco Fidel
Suárez. En 1924 fue ministro de gobierno por última vez e hizo parte
del ministerio de correos y telégrafos como encargado, ambos ministerios
durante el gobierno de Pedro Nel
Ospina.
Abadía no tuvo contendores en las elecciones para la
presidencia de 1926 pues el partido liberal no presentó candidato. Se posesionó
el 7 de agosto, recibiendo la presidencia del general Pedro Nel Ospina. Su
gobierno comenzó con buena aprobación gracias a las obras que se estaban
impulsando desde la administración de Ospina. Sin embargo debió enfrentar las
huelgas que poco después se convertirían en revueltas provocadas por los
dirigentes sindicales de compañías agrícolas. Una de las huelgas más destacadas
fue la de la compañía United Fruit Company, que dio paso a la represión de las
fuerzas del estado conocida como la masacre de las bananeras del 6 de diciembre
de 1928. Este tipo de represiones fueron adoptadas por el gobierno de Abadía ya
que desde hace muy poco tiempo (específicamente desde la administración de
Marco Fidel Suárez al aprobar la ley de huelgas) los obreros y campesinos se
unían para hacer exigencias al gobierno, y este a su vez no sabía cómo proceder
ante las multitudes. Se sumaba además la desconfianza que producía en el
gobierno el hecho de que la ideología comunista se instalara en el país, ideología
base de muchos de los líderes de las huelgas. Lo más notable de su
administración fue la definición de los límites con Brasil en noviembre de
1928, Perú (mediante el tratado Lozano-Salomón, firmado en 1922 pero ratificado
en marzo de 1928) y la definición de la soberanía de Colombia sobre el
archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina por medio del tratado
Esguerra-Bárcenas de marzo de 1928, donde también se indica que Colombia
reconoce la soberanía de Nicaragua sobre la costa de Mosquitos. En 1929 le
correspondió enfrentar la crisis económica mundial y se fundó la Federación
Nacional de Cafeteros.
Abadía Méndez fue el último presidente de “La Hegemonía
Conservadora”, ya que al final de su gobierno el partido conservador se
encontraba dividido, lo cual permitió el triunfo del candidato liberal Enrique Olaya
Herrera. Fue Profesor de Derecho, asistió a la cámara de
representantes en varias ocasiones y realizó labores diplomáticas. Hizo parte
de la Academia Colombiana de la Lengua y de la Academia Colombiana de
Jurisprudencia. Después de la presidencia se dedicó a actividades personales.
Miguel Abadía Méndez muere el 15 de mayo de 1947 en La Unión, Cundinamarca,
municipio donde se encontraba su finca.
Esta es Colombia, que cuenta con 32 departamentos y
capitales, que son:
Amazonas: Leticia Antioquia
: Medellín Arauca : Arauca Atlantico : Barranquilla Bolivar : Cartgena Boyacá : Tunja Caldas : Manizales Caquetá
: Florencia Casanare : Yopal Cauca : Popayán Cesar : Valledupar Chocó: Quibdó Córdoba : Montería Cundinamarca : Bogotá Guainía : Puerto Inírida Guaviare : San José del Guaviare Huila : Neiva La
Guajira : Riohacha Magdalena :
Santa Marta Meta :
Villavicencio Nariño : Pasto Norte de Santander : Cúcuta Putumayo : Mocoa Quindio :
Armenia Risaralda : Pereira San Andres y Providencia : San Andres Santander : Bucaramanga Sucre
: Sincelejo Tolima : Ibagué Valle del Cauca: Cali Vaupés : Mitú Vichada : Puerto Carreño
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