FARÁNDULAS

miércoles, 19 de marzo de 2014

MITOS Y LEYENDAS DE SAN MARCOS SUCRE


MITOS Y LEYENDAS



En Colombia existen un sinnúmero de manifestaciones culturales que expresan la variedad étnica, religiosa, de costumbres, tradiciones y formas de vida de su población, así como su riqueza natural y diversidad de climas, geografías y paisajes, entre otros.
En este módulo podrá consultar información relacionada con temas culturales como arqueología, festividades, mitos y leyendas, danzas y personajes, de cada uno de los departamentos de Colombia. Esta información le permitirá comprender de manera fácil y rápida los aspectos más relevantes de la cultura propia de cada región, con el fin de estimular el conocimiento y difusión de la riqueza cultural del país en todas sus expresiones.


LEYENDA DE LA MARQUESITA


En la historia de la iniciación del municipio de San Marcos se hace necesario hablar de una mujer de gran temple en su carácter, decisión de mando y belleza, cuyo nombre era Isabel Madariaga, a quien apodaban Marquesita.

Cuentan que su hacienda poseía tantos vacunos, que en la construcción de los corrales y cuadras se empleaban centenares de pieles de buey, con notable beneficio para los bejucos silvestres; dicen que convertía en novillos cada binde o comején de la hacienda, con solo darles una patada.

Su pasatiempo consistía en criar palomas, y eran tantas las que tenía que en las mañanas y por las tardes se oscurecía el cielo con su ida y venida.

Su riqueza era tan grande que cuando sacaban las monedas de oro y plata para lavarlas, daba un aspecto fantástico a los patios y corrales de la hacienda, ya que los discos metálicos eran puestos al sol para su secado, bajo la vigilancia de sus sirvientes más leales.

Cuando murió hubo una gran conmoción en su hacienda, el ganado comenzó a bramar y a arremolinarse, las palomas levantaron vuelo y los animales domésticos huyeron al monte. Al final, sus ganados emprendieron un viaje interminable guiados por un canto de vaquería sobrenatural y eran tantos, que sus miles de pezuñas hundieron la tierra fangosa labrando un canelón, lecho por donde hoy corre el caño Carate.


EL ESPANTO DEL CEMENTERIO


Hace mucho tiempo, en Las Flores, una mujer vestida de blanco que caminaba de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba por el callejón que conduce al cementerio, los que la vieron decían que no pisaba sobre la tierra sino que andaba por el aire; una noche un muchacho de apellido Cardoso se dispuso a descubrir qué era. Primero se emborrachó porque dijo: “Me la voy a coger borracho”, cuando seguía a su casa se acordó del espanto y se dispuso a descubrirlo, cuando la encontró caminó hacia ella y el espanto hizo lo mismo, cuando el muchacho se dio cuenta que no era nada bueno salió corriendo y antes de llegar a su casa se tropezó y cayó en una zanja, allí lo alcanzo el espanto y lo mordió todo, dejándolo negro. El muchacho iba vestido de blanco, pero después del suceso el vestido ni siquiera se ensucio, el muchacho murió y el espanto nunca más salió.


No hay comentarios:

Publicar un comentario